A pesar de la superación del COVID-19, se mantiene reductos administrativos en los que persisten la exclusiva atención presencial previa cita (irregular) ad hoc. Esto implica desatención al ciudadano que sufre colas e intemperies mientras tiene que cumplir términos y plazos inexorables.
La nueva “normalidad” parece que ha llegado para quedarse, sin razones ni planificación para cumplir una atención exigible.
¿Estas son las ventajas de la digitalización?
Y más aún, con este abandonismo se facilitan ciberataques a las PYMES por el desarrollo expansivo de datos.
Mejor la vuelta a las otras maneras.